El Partenón de Nashville | Estados Unidos
A finales del siglo XIX, la ciudad de Nashville, en Tennessee, Estados Unidos, era conocida por ser una de las ciudades más refinadas y educadas del país. Fue la primera ciudad del sur que estableció un sistema de educación pública, siendo el hogar de al menos media docena de universidades y colegios. Esto le sirvió a Tennessee para ganarse el apodo de “la Atenas del Sur”.
Cuando se anunció que Nashville llevaría a cabo la “Exposición del Centenario de Tennessee” en 1897 para celebrar el 100 aniversario de la admisión del Estado en la Unión, la ciudad decidió que este evento debería ser representado adecuadamente.
Diecinueve estados participaron en la Expo, incluyendo dieciséis naciones extranjeras. Una gama muy impresionante de edificios se construyeron para albergar las exposiciones, pero el favorito de la mayoría de los asistentes a la Expo, fue la réplica a escala del Partenón, el antiguo templo griego dedicado a la diosa Atenea.
Al igual que todos los edificios de aquella feria, el Partenón no estaba destinado a permanecer en su ubicación más allá del evento. Estaba hecho de yeso, madera y ladrillos, por lo que podría ser derribado al final de la Expo sin ningún problema. Pero cuando la Expo llegó a su fin, los ciudadanos sentían tal adoración por este particular Partenón que la ciudad decidió mantenerlo.
El Partenón se mantuvo en pie 20 años, hasta que ya no pudo aguantar más. Fueron 20 años de lluvia y sol los que resistió. A continuación, la estructura original fue demolida y reconstruida con hormigón. El nuevo Partenón fue inaugurado en 1931. En la actualidad, funciona como un museo de arte, y se erige como la pieza central de Centennial Park, un parque de la ciudad que conmemora la memorable Expo de 1897.
En 1990, una réplica de la estatua de Atenea Partenos fue construida en el interior del Partenón. La original escultura de Atenea Partenos, ahora perdida en la historia, era enorme, de oro y marfil, realizada por Fidias y sus ayudantes y alojados en el Partenón de Atenas. La copia moderna de Nashville es de cemento, yeso y fibra de vidrio.
A pesar de las numerosas réplicas de Atenea Partenos en todo el mundo, la versión de Nashville destacada entre todas las demás, debido a su escala y sus trabajados detalles. La estatua tiene 12,8 metros de altura, siendo así la escultura más grande de interior en el mundo occidental.
El Partenón de Nashville durante la Expo de 1897.